miércoles, 4 de enero de 2012

VOTADME SI OS GUSTA: PARTICIPO CONCURSO MICRORRELATOS FUNDACIÓN CAMILO JOSÉ CELA

HA AUMENTADO MUCHO EL NÚMERO DE VOTOS, PERO QUIERO MAAAAAAASSSSSSSSSS.

Muchas gracias a todos, ánimo y a darle al click

Estimados amigos, en primer lugar, FELIZ AÑO NUEVO A TODOS.

Os pido en esta ocasión vuestra colaboración, aquí tenéis el microrrelato con el que participo en el concurso de microrrelatos de la Fundación Camilo José Cela, y que tenía como punto de obligatorio cumplimiento, el que comenzara con la frase que inicia la obra La Colmena de Cela. Para pasar a la siguiente ronda necesito vuestros votos, espero que os guste y que decidáis pasar unos segundos votándome. El plazo finaliza el día 9 de enero:

Lo podéis hacer en votación adultos: Pablo Lorente Muñoz, relato "Madrid enamorado":  http://concursodemicrorrelatosfcjc.wordpress.com/vota/

El relato, junto con muchos otros, se encuentra en la página: http://concursodemicrorrelatosfcjc.wordpress.com/microrrelatos/adultos/
con fecha de publicación: 9-12-2011

GRACIAS


Madrid enamorado
No perdamos la perspectiva, yo ya estoy harta de decirlo, es lo único importante. Doña Rosa va y viene por entre las mesas del Café y gracias a eso tenemos a estos clientes. Vale que doña Rosa es muy joven, ni siquiera sé por qué la llamamos doña, pero es que sin ella aquí el Café estaría desierto. Sí, ya sé que la belleza de la niña es de otro mundo, que es pecaminoso hasta mirarle a los ojos, eso por no hablar de esos pechos llenos de vida y el talle de la muchacha.Yo soy mujer y no entiendo de dónde desprende tanta belleza, que hasta a mí se me van los ojos, y no hace falta ni que vaya enseñando carne; dicen que “donde hay carne hay fiesta”, pero es que a doña Rosa la puedes tapar con un sábana vieja y desprenderá la misma belleza, lo he dicho mil veces, se lo dije hasta al escritor este tan bueno, el del premio, el bueno de don Camilo venía al Café por lo mismo, a verla a ella, de tan bonica que es. Ahí se sentaba en la esquina, y a ratos escribía y a ratos miraba, ¿cómo no iba a hacerlo?
Y que nos tiene lleno el Café, eso también lo he dicho mil veces, y además bonito, las flores que le traen, que adornan todo que ni caben más. Que se queje el Obispo, el Alcalde y quien quiera, doña Rosa seguirá dando vueltas por el Café, y sirviendo lo que pida el personal, faltaría más, con la que está cayendo, ¿a quién hacemos daño, eh, a quién?
Pablo Lorente Muñoz. 09/12/2011 15:26:00

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