OPINIÓN: CARTA A UN POLÍTICO

QUERIDO POLÍTICO

Durante estos años he hecho todo lo que se supone que tenía que hacer, lo juro por Snoopy, fui un niño bueno en el colegio y en el instituto, luego estudié en la universidad, tanto que todavía sigo estudiando, hasta inglés estudio, si es que soy un modelo, de verdad.

El caso es que me he cansado de estudiar, hasta el moño por no decir otra cosa. He hablado con un montón de gente preparada, con carreras y eso, les he preguntado qué hay que hacer para ser político, nada, nadie tiene ni idea. Ni un triste teléfono han encontrado donde acudir, ni un teléfono de la esperanza laboral ni nada. Resulta que para ser bombero sé que tengo que correr x distancia en tanto tiempo, y nadar lo que sea, para ser médico la carrera y el M.I.R., para ser profesor un Máster y un cierto nivel de un idioma extranjero, para ser mecánico un grado de Formación Profesional, ¿pero para ser político?

Le he estado dando vueltas y, claro, es como ser astronauta, no hay una carrera de astronauta, así que me imagino que será algo similar, alguien es la leche en una especialidad y le ficha alguien para ocupar un cargo de responsabilidad porque vela por el bien común y tal. Esto me encanta, resulta que un Ministro de Economía pasa a ocupar la cartera de Defensa, y me quedo atónito, olé lo bueno que es este tío, y cuando ya no gobiernan los meten a un Consejo de Estado que suena de lo más profesional y estupendo.

Así que tengo dudas, si son tan buenos, ¿cómo han sido capaces de dejar una deuda de casi mil millones de euros? Mil millones es una cifra guapa, no soy capaz ni de imaginarlo, en realidad, suena a mucho si la comparamos con los casi seis millones de parados, viéndolo así no es casi nada. Lo extraño es que a ningún asesor de alguno de estos figuras se le haya ocurrido presentarlo así, total, seis millones en comparación con la infinitud del universo. Lo más extraño es que ninguno de esos parados, muchos de ellos infinitamente mejor preparados que estos graciosos que nos han llevado a la ruina, tenga la oportunidad de sentarse con alguno de nuestros políticos y mandarle copiar cien veces: “no seré tan mal político y no derrocharé, no seré tan mal político y no derrocharé”.